«Cuida de él. Buenos samaritanos en el camino»
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¿No estaremos rechazando también nosotros a Cristo con nuestras actitudes que dejan mucho que desear como cristianos: egoísmos, comodidades, falta de compromisos, con nuestros silencios y miedos de ir a contracorriente en algunos ambientes…. ?
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La página evangélica del día (cf. Marcos 6, 1-6) presenta a Jesús cuando vuelve a Nazaret y un sábado comienza a enseñar en la sinagoga. Desde que había salido de Nazaret y comenzó a predicar por las aldeas y los pueblos vecinos, no había vuelto a poner un pie en su patria…
¿Cómo es tu fe? ¿crees que Jesús te puede curar y te puede despertar de la muerte? ¿Dedicas tiempo a hacer crecer tu fe con la oración, con la escucha de la Palabra de Dios, con la contemplación, con el agradecimiento a Dios?
¿Tus obras dan testimonio de Aquel en quien crees ?
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El Evangelio de hoy presenta el relato de la resurrección de una niña de doce años, hija de uno de los jefes de la sinagoga, el cual se echa a los pies de Jesús y le ruega: «Mi niña está en las últimas; ven, impón las manos sobre ella, para que se cure y viva» (Mc 5, 23). En esta oración vemos la preocupación de todo padre por la vida y por el bien de sus hijos. Pero percibimos también la gran fe que ese hombre tiene en Jesús. Y cuando llega la noticia de que la niña ha muerto, Jesús le dice: «No temas, basta que tengas fe» (v. 36). Dan ánimo estas palabras de Jesús, y también nos las dice a nosotros muchas veces: «No temas, basta que tengas fe». Al entrar en la casa, el Señor echa a la gente que llora y grita y dirigiéndose a la niña muerta dice: «Contigo hablo, niña, levántate» (v. 41). Inmediatamente la niña se levantó y echó a andar. Aquí se ve el poder absoluto de Jesús sobre la muerte, que para Él es como un sueño del cual nos puede despertar…
La lectura tomada de los Hechos de los Apóstoles nos habla de la primera comunidad cristiana acosada por la persecución. Una comunidad duramente perseguida por Herodes que «hizo pasar a cuchillo a Santiago, hermano de Juan» y «decidió detener a Pedro… Mandó prenderlo y meterlo en la cárcel» (12,2-4).
Sin embargo, no quisiera detenerme en las atroces, inhumanas e inexplicables persecuciones, que desgraciadamente perduran todavía hoy en muchas partes del mundo, a menudo bajo la mirada y el silencio de todos. En cambio, hoy quisiera venerar la valentía de los Apóstoles y de la primera comunidad cristiana, la valentía para llevar adelante la obra de la evangelización, sin miedo a la muerte y al martirio, en el contexto social del imperio pagano; venerar su vida cristiana que para nosotros creyentes de hoy constituye una fuerte llamada a la oración, a la fe y al testimonio.
Una llamada a la oración. La comunidad era una Iglesia en oración: «Mientras Pedro estaba en la cárcel bien custodiado, la Iglesia oraba insistentemente a Dios por él» (Hch 12,5). Y si pensamos en Roma, las catacumbas no eran lugares donde huir de las persecuciones sino, sobre todo, lugares de oración, donde santificar el domingo y elevar, desde el seno de la tierra, una adoración a Dios que no olvida nunca a sus hijos…
El día 29 de junio, solemnidad de San Pedro y San Pablo, celebramos el Día del Papa y la colecta llamada desde los primeros siglos Óbolo de San Pedro. Por eso el domingo más cercano estamos invitados, de manera especial, a meditar en el ministerio del sucesor de Pedro, el Papa Francisco, a orar por él y a contribuir con nuestras limosnas y donativos a su misión evangelizadora y de caridad.
Para más información: Óbolo de San Pedro
MONICIÓN DE ENTRADA
Bienvenidos un domingo más a la celebración de la Eucaristía.
A veces, en nuestra vida tenemos dificultades y problemas: una pelea, una enfermedad, la muerte de alguien a quien queremos mucho… Si en esas situaciones, confiamos en Jesús, nos dará paz, tranquilidad y calma…
Infórmate AQUÍ sobre la Campaña «Me apunto a religión»
Muchos padres ya estáis matriculando a vuestros hijos en los colegios o institutos para el próximo curso académico. Como bien sabéis, al realizar la matrícula, los padres católicos debéis pedir explícitamente la clase de religión y moral católica a fin de que vuestros hijos sean educados de acuerdo con vuestras convicciones y creencias.
El ejercicio de este derecho, que está garantizado por la Declaración Universal de los Derechos Humanos y por la Constitución española, es una obligación moral porque forma parte de la educación religiosa que los padres cristianos tenéis que ofrecer a vuestros hijos. Esto quiere decir que quienes pretenden impedir la realización de este derecho están poniendo las bases para una sociedad totalitaria.
Por encima de partidismos políticos y más allá de las variadas ideologías culturales del momento, en una sociedad democrática, los legisladores tienen que poner los medios para garantizar la libertad de los padres en la educación de sus hijos de acuerdo con su conciencia y con sus convicciones religiosas, morales y culturales. Este derecho está claramente reconocido en todos los países verdaderamente democráticos…
¿ Qué puesto ocupa Dios en tu vida?
¿Te preocupa el crecimiento y la vivencia de la fe?
¿Tengo esperanza en los frutos que puedan llegar a producir mis semillas, siendo posible que no llegue a verlos?
¿Comprendo que en las relaciones y tareas cotidianas, desde mi pequeñez y con humildad, puedo colaborar al Reino de Dios?
Pidamos al Señor esta gracia de cuidar el reino de Dios que está dentro de nosotros y en medio de nosotros y de nuestras comunidades: cuidarlo con la oración, la adoración, el servicio de la caridad, silenciosamente”.
Monición de entrada:
Bienvenidos todos a esta celebración de la Eucaristía. Hoy las lecturas nos invitan a sembrar semillas del Reino en este mundo en el que Dios nos ha puesto, semillas pequeñas que con la fuerza de Dios darán abundantes frutos…