El pasado viernes, día 9 de diciembre, sustituimos la catequesis por oratorio, un rato de encuentro con el Señor.
En silencio, los niños y niñas escucharon la Palabra que narra el nacimiento de Jesús, nuestro Salvador. Dieron gracias a Dios y uno a uno, arrodillados, adoraron al Niño y expresaron lo mucho que le quieren, entregándole su corazón.
Finalizamos este rato de oración con la bendición de las imágenes del Niño Jesús que cada uno colocará en el belén de su casa y cantando villancicos con la alegría de sentirnos muy amados por Dios.