TIEMPOS LITÚRGICOS
A lo largo del año, la Iglesia celebra la vida de Jesús, desde su nacimiento en Belén, hasta su Pasión, Muerte, Resurrección y Ascensión a los cielos.
Se llama Año Litúrgico a la celebración que hace la Iglesia en la Liturgia de los principales misterios de la vida del Señor.
La liturgia es la manera de celebrar nuestra fe. No solo tenemos fe y vivimos de acuerdo con ella, sino que la celebramos con acciones de culto en las que manifestamos, con otros cristianos y públicamente, nuestra adoración a Jesucristo, presente con nosotros en la Iglesia. Al vivir la liturgia, nos enriquecemos de los dones que proceden de la acción redentora de Dios.
Ya sabes que el año natural se divide en doce meses. Es lo que tarda la tierra en dar la vuelta al sol.
El Año Litúrgico se divide sólo en seis tiempos. Durante ellos los cristianos damos la vuelta a la vida de Jesús.
Estos tiempos se llaman así:
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Tiempo de Adviento.
- Tiempo de Navidad.
- Tiempo de Cuaresma.
- Triduo Pascual.
- Tiempo de Pascua.
- Tiempo Ordinario.
TIEMPO DE ADVIENTO:
Es la preparación a la Navidad y al retorno de Jesús en su segunda venida, al final del mundo. Este tiempo litúrgico consta de las cuatro semanas que preceden al 25 de diciembre, abarcando los cuatro domingos de Adviento.
TIEMPO DE NAVIDAD:
Celebramos con alegría el nacimiento de Jesús. Este tiempo va desde la Navidad o Nacimiento, que se celebra el 25 de diciembre y nos recuerda que Dios vino a este mundo para salvarnos. Comprende la Epifanía que se celebra el 6 de enero y termina con la celebración del Bautismo de Jesús por Juan Bautista. El Bautismo del Señor se celebra el domingo después la Epifanía.
TIEMPO ORDINARIO I:
El primer Tiempo Ordinario abarca desde la fiesta de la Epifanía hasta inicio de Cuaresma. En el Primer y Segundo tiempo ordinario del Año Litúrgico, no se celebra ningún aspecto concreto del misterio de Cristo. En ambos tiempos se profundizan los distintos momentos históricos de la vida de Cristo para adentrarnos en la historia de la Salvación.
TIEMPO DE CUARESMA:
En ella nos preparamos para la Pascua. Es tiempo de conversión. La Cuaresma comienza con el Miércoles de Ceniza y se prolonga durante los cuarenta días anteriores al Triduo Pascual. Es tiempo de preparación para la Pascua o Paso del Señor. Es un tiempo de oración, penitencia y ayuno. Es tiempo para la conversión del corazón
TIEMPO DE PASCUA:
Es la gran fiesta de los cristianos, celebramos que ¡Cristo ha resucitado y vive para siempre! Nos comunica su vida y nos llena de alegría.
El Tiempo de Pascua es tiempo de paz, alegría y esperanza. Dura cincuenta días, desde el Domingo de Resurrección hasta Pentecostés, que es la celebración de la venida del Espíritu Santo sobre los apóstoles. En esta fiesta se trata de abrir el corazón a los dones del Espíritu Santo.
TIEMPO ORDINARIO II:
Después de Pentecostés sigue el segundo Tiempo Ordinario del año litúrgico que termina con la fiesta de Cristo Rey.
CON LA SOLEMNIDAD DE CRISTO REY,
TERMINA EL AÑO LITÚRGICO
La Iglesia fija su Año Litúrgico a partir de la luna llena que se presenta entre el mes de marzo o de abril.
Por lo tanto, cuando Jesús celebró la Última Cena con sus discípulos, respetando la tradición judía de celebrar la pascua – el paso del pueblo escogido a través del Mar Rojo hacia la tierra prometida – debía de haber sido una noche de luna llena. Hecho que se repite cada Jueves Santo.
La Iglesia marca esa fecha como el centro del Año litúrgico y las demás fiestas que se relacionan con esta fecha cambian de día de celebración una o dos semanas.
FIESTAS QUE CAMBIAN CADA AÑO
· Miércoles de Ceniza
· Semana Santa
· La Ascensión del Señor
· Pentecostés
· Fiesta de Cristo Rey
FIESTAS QUE NUNCA CAMBIAN
·Inmaculada Concepción
(8 de diciembre)
· Navidad (25 diciembre)
· Epifanía (6 enero)
· Candelaria (2 de febrero)
· Fiesta de San Pedro y San Pablo
(29 de junio)
· La Asunción de la Virgen
(15 de agosto)
· Fiesta de todos los santos
(1 de noviembre)